
(3 raciones)
INGREDIENTES:
600g | Zanahoria |
200g | Trigo sarraceno |
150g | Queso Feta |
2 | Cebolletas |
1 | Limón |
5-6 ramitas | Perejil |
2 cdtas. | Cúrcuma |
6 cdas. | Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) |
Sal y pimienta negra | |
Chili en polvo (opcional) |
ELABORACIÓN:
Precalienta el horno a 220ºC.
Lava las zanahorias y córtalas a lo largo por la mitad o en 4 partes según el grosor de las zanahorias. Pon las zanahorias en un bol grande y sazona con sal y pimienta negra y un chorrito (2 cucharadas aprox.) de AOVE. Mezcla todo bien.
Prepara una bandeja de horno con papel vegetal y coloca las zanahorias encima y hornea durante 15 a 20 minutos. Según si quieres comer las zanahorias más blandas o crujientes puedes adaptar el tiempo del horneado.
Para preparar el trigo sarraceno primero hay que lavarlo muy bien. Para ello, lo mejor es colocar el trigo sarraceno en un colador debajo del grifo con agua caliente. Remueve el trigo con la mano mientras lo pasas por el agua durante 1 a 2 minutos.
Lleva a ebullición 350ml de agua con sal y cúrcuma y añade el trigo sarraceno. Deja que cuaje el trigo durante 10 minutos. Después remueve todo con un tenedor.
Corta la cebolleta en daditos y mézclala con el trigo sarraceno.
Prepara un bol pequeño con 4 cucharadas de zumo de limón 4 cucharadas de AOVE, sal, pimienta negra y chili a tu gusto. Pica el perejil y añádelo al aliño.
Mezcla el aliño con el trigo sarraceno y añade el queso feta cortado en daditos y las zanahorias.
El plato es apto para ser recalentado así que te puedes llevar las sobras en un tupper a tu trabajo en los siguientes 1 a 3 días.
El trigo sarraceno no contiene gluten por lo cual este plato es apto para celíacos.
Por ser un plato vegetariano nos aporta mucha proteína de alta calidad proveniente del trigo sarraceno y vitaminas por parte de la zanahoria.
Para mí es un plato completo y saciante además de estar buenísimo.
